Juan N. Díaz Gálvez, EAR-KO (provisional), EAR-309, EA4BO. Constructor de la Radio INGAR

 Juan N. Díaz Gálvez, EAR-KO (provisional), EAR-309, EA4BO. Constructor de la Radio INGAR

Juan N. Díaz Gálvez, EAR-KO, en la emisora EAR-23 de su padre. Archivo familiar

Juan Nepomuceno Díaz Gálvez, natural de Écija (Sevilla) era hijo de Juan Nepomuceno Díaz Custodio, EAR-23, EA7AA; y María de los Dolores Gálvez Lagrera.

Su afición a la radioemisión surgió dentro de su ambiente familiar. Su padre había construido una estación de radioemisión de onda corta y en 1927 obtenía para ella licencia de quinta categoría con indicativo oficial EAR-23, que le fue reasignado al quedar vacante este. Pronto entabla amistad con otros radioaficionados españoles y se une a la «Rueda de las dos y media» fundada por Alfonso Quilez López, EAR-123, de Linares (Jaén), junto a Francisco Bellón, EAR-110, de Madrid, y a la cual se sumaron también, Manuel Sanz, EAR-195, de Orihuela (Alicante); y Antonio Victorero, EAR-169, de Santander. 

Díaz Gálvez se inicia en la afición en la estación de su padre, utilizando el indicativo provisional EAR-KO. Más tarde se establece en Madrid, donde estudia la carrera de ingeniería industrial. 

A comienzos de 1932, visita, acompañado de Alfonso Quilez López, EAR-123, la sede de la asociación EAR en Madrid. Por esas fechas fue cuando también se dio de alta como socio de Red Española, organización de radioemisores que había surgido en 1929 como contestación al inmovilismo de Miguel Moya, EAR-1, Presidente de EAR, ante las demandadas de reformas y nuevos servicios requeridas por sus socios.

Alfonso Quílez López, EAR-123, fue uno de los aficionados que también practicaron la radiodifusión al mismo tiempo que lo hacían en bandas de aficionado con sus estaciones de quinta categoría. Quílez, practicante de profesión, obtuvo, al amparo del decreto de 8 de diciembre de 1932, el 22 de mayo de 1933 el indicativo EAJ-37 para Radio Linares que instaló en la calle Campanario 6 de su ciudad, donde su familia había tenido una farmacia. EAJ-37 emitió desde entonces con 200 vatios de potencia en longitud de onda de 200 metros. 

Juan N. Díaz Gálvez, ex-EAR-KO, obtiene en Madrid en octubre 1933 el indicativo oficial EAR-309 para su estación de quinta categoría que instaló en el número 47 de la calle Claudio Coello.

Mientras realiza sus estudios de ingeniera, Juan se hizo miembro de la Federación de Asociaciones Profesionales de Alumnos de las Escuelas Especiales de Ingenieros y Arquitectos, que edita una revista denominada INGAR, órgano oficial de dicha Federación, con la que colabora activamente. 

Durante el curso 1934-1935, cuando su indicativo oficial de radioemisor pasó a ser EA4BO, bajo la nueva nomenclatura que entró en vigor entonces, imparte un Curso de Radio organizado por la Asociación de Estudiantes de Industriales, cuyas sesiones tenían lugar los miércoles y viernes a las siete de la tarde. También tenían previstas visitas a los más importantes talleres de material de radio, entre ellas Telmar y Standard.

Tal era el entusiasmo por la radio de Juan que éste le llevó a construir una emisora tipo broadcasting con longitud de onda de 42m, a la que bautizó como Radio INGAR. Esta fue instalada en el local de la Federación e inaugurada el 5 de julio de 1935 en un acto al que asistieron el Presidente del Instituto de Ingenieros Civiles de España, varios profesores de las Escuelas Especiales, ingenieros y público en general, que abarrotaron el domicilio social. 

Radio INGAR construida por ex-EAR-KO, ex-EAR-309, EA4BO

En los días posteriores se hicieron algunas pruebas que fueron controladas por miembros de la F.AR. (Federación de Agrupaciones de Radio), destacando entre ellos Rafael Kurtz, EA4AE, que con gran paciencia pasó controles de escucha a Díaz Gálvez, casi a diario. 

Las frecuentes visitas y avisos de empleados técnicos de la Dirección General de Telecomunicación puso fin a las emisiones y corta vida de Radio INGAR, que tuvo que proceder a desmontar todos sus aparatos, interrumpiendo definitivamente su actividad.

La repercusión en la prensa de esta iniciativa de Díaz Gálvez fue enorme. Los periódicos Ahora y El Debate se hacían eco de la inauguración de Radio INGAR en sus respectivas ediciones del 7 de julio. También el diario El Sol publicaba el 2 de agosto la noticia en su sección de «Radiotelefonía» con el titular «Una nueva emisora. Radio INGAR», que incluía una fotografía de la estación. 

En la revista INGAR se relataban meses después las vicisitudes por las que había atravesado esta efímera emisora y con ello se cerraba un episodio de la vida de Juan N. Díaz Gálvez que pone de manifiesto su carácter emprendedor heredado de su padre.

Juan N. Díaz Gálvez se casó con María Rosa de La Cámara y Gasset, con la que tuvo cinco hijos. 

Con el estallido de la Guerra Civil la Radioafición quedó prohibida, situación que se prolongó más allá al iniciarse la II Guerra Mundial.

Tras la restauración de la legalidad de la práctica de la Radioafición en 1949, Juan no renovó su indicativo.

Juan N. Díaz Gálvez falleció en Madrid el 14 de febrero de 2002.